Hasta finales del primer semestre de 2015, G DATA fue capaz de impedir la pérdida de más de 100 millones de euros por robo y uso fraudulento. Y esto, con varias decenas de miles de intentos de ataque al año.
Nuestros desarrolladores se han planteado el reto de proteger los datos de su cuenta ya en el momento de abrir una página web: desde 2011, nuestra tecnología patentada BankGuard es una de las funcionalidades de todas las soluciones de seguridad. Detecta automáticamente los intentos de manipulación y trabaja independientemente de las firmas.
En cambio, otros programas antivirus detectan los elementos dañinos que se ciernen sobre sus transacciones bancarias online cuando ya es demasiado tarde. Antes de que los analistas hayan registrado las características de un troyano bancario desconocido, pasa cierto tiempo. Finalmente se incluyen en la recopilación de firmas de virus y se envían a los usuarios en forma de actualización. Pero hasta ese momento el software no detecta el peligro. Este periodo lo aprovechan los programas dañinos, atacando, por ejemplo, cuando el usuario accede a la página web de su banco.